Si tienes depresión recuerda: La depresión se puede tratar y puedes recuperarte.
Solicita ayuda. Los profesionales sanitarios pueden proporcionarte información sobre la depresión y apoyo terapéutico. Esta información incluye las causas de la enfermedad, su curso y las posibilidades de tratamiento, así como los recursos disponibles con los que puedes contar.
Aprende más cosas sobre la depresión, de manera que puedas entender mejor tus síntomas y su significado. No tengas miedo de pedir ayuda y colabora con tu médico para desarrollar un plan que te ayude a controlar tu depresión.
Cuando sufres una depresión, se pueden ver afectadas tus relaciones familiares, laborales y sociales. Pregúntale a tu médico por herramientas que puedas compartir con tus amigos y familiares.
Es probable, que después de la primera consulta, tu médico te indique un tratamiento específico que ayude a recuperarte.
“Los objetivos de los tratamientos de la depresión son: hacer que tus síntomas mejoren, que te sientas bien, que puedas empezar a disfrutar de la vida de nuevo y a tratar tus problemas con eficacia.”
Dependiendo de tus síntomas, de la gravedad de la depresión y de las circunstancias, el médico te puede sugerir psicoterapia, pastillas antidepresivas o ambos.
Dos de los tratamientos psicológicos más comunes son la terapia cognitivo conductual (TCC) y la terapia interpersonal (TIP).
En el cerebro, las células transmiten mensajes de unas a otras gracias a unas sustancias químicas llamadas neurotransmisores. Se piensa que en la depresión hay una menor concentración de alguno de estos neurotransmisores, particularmente la serotonina y la noradrenalina. Los antidepresivos incrementan las concentraciones de estas sustancias químicas en las terminaciones nerviosas del cerebro ayudando así a mejorar tu estado de ánimo cuando tienes depresión.
“Pide información a tu médico sobre los distintos tipos de antidepresivos y, si ya has tomado alguno previamente, infórmale sobre cuál ha sido y cómo ha sido tu experiencia.”
Como todos los medicamentos, los antidepresivos tienen algunos efectos secundarios, aunque estos suelen ser leves y suelen disminuir con el tiempo.
Cada antidepresivo tiene efectos secundarios y es tu médico de familia o tu psiquiatra el que te informará sobre los efectos secundarios que puedes esperar del medicamento que te ha prescrito y al que debes transmitir todas tus dudas y preocupaciones.
No dejes de tomar el antidepresivo sin antes hablar con su médico.
“Los antidepresivos no generan adicción, no necesitarás tomar una cantidad cada vez mayor para conseguir el mismo efecto y no te encontrarás con ansias de tomar antidepresivos.”
Aunque no son adictivos, si dejaras los antidepresivos de golpe, podrías tener síntomas de retirada como mareos, náuseas, cefalea o ansiedad. Casi siempre se pueden evitar reduciendo lentamente la dosis antes de dejar los antidepresivos.
Antes de empezar el tratamiento, es importante que sepas que: los antidepresivos necesitan cierto tiempo (normalmente se necesitan entre 2 y 4 semanas) para experimentar alguna mejoría y determinar si es eficaz para controlar tu depresión. Por tanto, si has empezado a tomar medicación, es necesario que la sigas tomando según lo acordado con tu médico, aunque al principio tengas dudas sobre sus beneficios.
Si no hay una mejora notable en 2-4 semanas, tu médico puede sugerirte que aumentes la dosis o, si la evolución de tus síntomas no es la esperada, se puede considerar la posibilidad de probar con otro tratamiento diferente.
“Para ver cuánto has mejorado, el médico te hará preguntas sobre tus síntomas o te dará un cuestionario.”
Una vez que tus síntomas hayan mejorado, el tratamiento con los antidepresivos debe continuar, al menos, de 9 a 12 meses para reducir el riesgo de que los síntomas reaparezcan. Si tu médico cree que pasado ese tiempo tienes riesgo de que la depresión regrese, es posible que el médico decida que tomes la medicación por un período más prolongado.
Cuando tú y tu médico decidáis que debes dejar de tomar el antidepresivo, es importante que disminuyas la dosis gradualmente. Pueden pasar semanas o incluso meses antes de que dejes de tomar la medicación por completo. Nunca dejes de tomar tus medicamentos por tu cuenta.
Y recuerda, la depresión se puede tratar. Si crees que tienes depresión, pide ayuda.
PP-PRQ-ESP-0314 JUL/21